Hoy presentamos una receta para comer de aperitivo o de primer plato, o simplemente para sorprender para quien cocines, esta receta es Tartar de Bonito con Aguacate y Mango. Vas a alucinar lo sencillo que es y lo sabrso que está. Delicioso.
En La Tienda de Sami te enseñaremos como realizar esta receta en unos pocos pasos.
Tartar de Bonito con Aguacate y Mango
Este tartar es fresco, sabroso y lleno de sabores tropicales.
Ingredientes
- 250 gramos de lomo de bonito
- 1 aguacate maduro
- 1 mango maduro
- 1 chalota o cebolla morada pequeña, finamente picada
- 2 cucharadas de cilantro fresco picado
- Jugo de 1 limón
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- Sal y pimienta negra al gusto
- 1 cucharada de sésamo tostado (opcional, para decorar)
Preparación
- Comienza por preparar el bonito. Asegúrate de que esté limpio y libre de piel y espinas. Córtalo en cubos pequeños y uniformes. Luego, colócalo en un tazón y resérvalo.
- Pela y deshuesa el aguacate y el mango. Córtalos en cubos del mismo tamaño que el bonito y agrégalos al tazón con el bonito.
- Agrega la chalota o cebolla morada finamente picada al tazón.
- En otro tazón pequeño, mezcla el jugo de limón, el aceite de oliva, el cilantro fresco picado, sal y pimienta al gusto. Esta mezcla será el aderezo para el tartar.
- Vierte el aderezo sobre el bonito, aguacate, mango y cebolla en el tazón. Con delicadeza, revuelve todos los ingredientes para que se impregnen con el aderezo.
- Asegúrate de que todos los sabores se mezclen bien y que los ingredientes estén bien distribuidos.
- Deja reposar la mezcla en el refrigerador durante unos 20-30 minutos para que los sabores se mezclen aún más y el tartar se enfríe un poco.
- Justo antes de servir, espolvorea con sésamo tostado si lo deseas para un toque adicional de sabor y textura.
- Sirve el Tartar de Bonito con Aguacate y Mango en platos individuales como aperitivo o entrante. Puedes acompañarlo con tostadas, galletas saladas o una ensalada fresca.
¡Espero que disfrutes de esta deliciosa receta de bonito! ¡Buen provecho!
¡Ya se nos ha hace la boca agua de pensarlo!